Recibimos la propuesta más importante de cara a Navidad para la consola Wii U. ¿Habrá cumplido las expectativas? Podemos decir que es uno de los mejores juegos lanzados este año, divertido, largo, con muchas sorpresa y no exento de calidad.
La historia en los juegos de Mario nunca ha sido muy importante y en este no es una excepción, simplemente tendremos que liberar a las hadas que han sido secuestradas por Bowser. Para ello podemos elegir cualquiera de los personaje clásicos de la saga, Mario, Luigi, Toad, Peach, cada uno con sus características y recorrer el país de las hadas que consta en un principio de ochos mundos (más sorpresas). Visitaremos desde paisajes helados, a playas, desiertos en definitiva variedad y calidad a partes iguales. Además, para aportar variedad al juego, introduce fases de muchos tipos, como en las que surfeas encima de un dragón, las contrareloj, la de carreras al estilo Mario kart, o la que te propone el reto de conseguir estrellas con Toad sin la posibilidad de saltar.
La finalidad del juego es llegar hasta la bandera final de cada fase, pero además tendremos un objetivo prioritario en cada fase que es encontrar las tres estrellas verdes, muy importantes al final del juego. Además podremos coleccionar sellos para usarlos posteriormente para comunicarnos con otros jugadores mediante dibujos. Para conseguir todo ello Mario y sus amigos tendrán disfraces especiales que les dotarán de poder especiales, como el de Gato (escalar), Tanuki (golpear con al cola), Foco (matar fantasmas), Mario boomerang, Mario fuego…, es increíble lo divertido y variado que hace el juego este aporte.
Mención especial merece tanto la música, que versiona temas clásicos como nuevos, así como la recreación de Mario cuando en las fases hay lluvia, es sencillamente inmejorable.
Una novedad que aporta el juego es que se puede jugar hasta 4 personas a la vez, cada uno manejando a un personaje diferente. Tendrán que cooperar, pero también competirán, ya que el que más puntos saque al final de cada fase, obtendrá una corona que llevará en las siguientes fases.
En definitiva, un juegazo como no hay en ninguna máquina. Solo por él, merece la pena tener la Wii U.