Vileda, junto a Proximity Barcelona, lanza #Nomeloregales, una campaña que anima a sus clientes a comprar sus nuevos productos eléctricos de limpieza antes de que alguien se los regale.


Los españoles no queremos recibir regalos de clara vocación práctica por Navidad. Así se desprende de distintos estudios publicados las últimas semanas, que sitúan al dinero, a las tarjetas regalo y a los electrodomésticos (utensilios de cocina, tostadoras…) en el top 3 de los peores regalos. De entre los regalos más odiados destacan las aspiradoras, que se postulan como el producto que mayor enfado nos produce al recibirlo, pero que sabemos que las necesitamos por lo útiles que son. Para contrarrestar este efecto, Vileda España, de la mano de su agencia, Proximity Barcelona, ha lanzado la campaña #Nomeloregales, en la que invita a sus clientes a comprarse sus nuevos productos eléctricos antes de que a alguien se le ocurra regalárselos. De esta manera, la marca de limpieza muestra una faceta honesta y cómplice, asumiendo que su robot aspirador Relax o su aspirador de ventanas eléctrico Windomatic, aunque son muy útiles y te facilitan mucho la limpieza, no son los obsequios emocionales que esperamos recibir de otra persona.

La campaña se articula en la web http://nomeloregales.vileda.es. Desde ahí, los usuarios pueden adquirir la nueva gama de eléctricos de Vileda, con descuentos especiales para aquellos que se los compren para sí mismos. Una vez los hayan adquirido, los clientes pueden anunciarlo con posters personalizados y compartirlos en sus perfiles sociales para evitar que Papá Noel o los Reyes Magos les dejen un producto eléctrico Vileda en el árbol el día de Navidad.

#Nomeloregales se complementa con un gráfico que enseña a reaccionar correctamente en caso de recibir un obsequio práctico. Asimismo, y pensando en aquellos que, a pesar de todo, quieran regalar un producto eléctrico Vileda, la marca ha diseñado un papel y pegatinas antisorpresa, que indican qué es lo que esconden tras el envoltorio para no crear falsas expectativas. Y es que todas las medidas son pocas para erradicar los regalos más funcionales o prácticos esta Navidad.