Uno de los elementos que la smart TV permite, y que en el caso de la televisión tradicional no era probable, es el de convertir el dispositivo en una plataforma ecommerce.
Un estudio de Delivery Agent y Nielsen ha analizado cómo responden los consumidores a los avances comerciales de las marcas en estos dispositivos conectados y qué futuro podría tener por tanto el que ya ha sido bautizado como “t-commerce”. El t-commerce o television commerce es el uso de la televisión como plataforma para acceder al comercio electrónico. Algunas marcas ya probaron en los últimos años, mientras las smart TV se iban instalando en los primeros hogares, a jugar con esta potencial realidad del ecommerce. Si el anuncio era visto desde una smart TV de Samsung, los consumidores podrían comprar con el mando a distancia.
Las televisiones inteligentes no solo permiten crear nuevas pasarelas que crean nuevas oportunidades de acción directa, sino que además posibilitan la aparición de nuevos formatos publicitarios que pueden conseguir una mejor respuesta entre los consumidores.