¿Son los españoles “early adopters”? Lo cierto es que cuatro de cada diez consumidores incluyeron un producto nuevo en su cesta de la compra la última vez que acudieron al establecimiento para llenar su despensa, según el informe Innovación Global de la consultora Nielsen.
En cuanto a los motivos de compra, los españoles tienen en cuenta la valoración de personas de su entorno, su finalidad de uso y el precio. Una cuarta parte afirma adquirir un artículo nuevo porque alguien se lo recomendó. Por su parte, un 24% de encuestados valora que el producto cubra algún tipo de necesidad específica, mientras que un 23% considera que vale la pena comprar ese artículo porque es más asequible que los que habitualmente se lleva. El sentimiento de satisfacción personal también desempeña un papel importante a la hora de comprar algo nuevo (21%) y la vinculación emocional con la marca (20%).
En plena sociedad de la información, los canales para informarse sobre nuevos productos se han multiplicado, aunque son los familiares y amigos, la propia tienda e Internet, por delante de la televisión, las principales vías para conocer las novedades del mercado. Seis de cada diez consumidores se informaron a través de la familia y las amistades sobre nuevos productos, mientras que la mitad reconoce enterarse de las novedades al recibir muestras de los productos. Asimismo, un 49% se informó por Internet, algo más que aquellos que lo hicieron por la vía más tradicional de los spots televisivos (46%).