Según informa el diario “ABC”, un estudio realizado por la Agencia para el Medio Ambiente y el Control de la Energía (ADEME), un correo electrónico con un fichero adjunto de un megaoctect leído por varios usuarios durante cinco minutos en sus respectivos ordenadores puede producir el equivalente a 19 gramos de CO2.


ADEME realiza este estudio haciendo un seguimiento de la cadena de producción y distribución, comenzando con la escritura del correo, viajando a través de cada ordenador del proveedor de internet hasta llegar a su destinatario final. El proceso tiene un costo más o menos preciso de energía, que se multiplica a través de las distintas pantallas, con su propio costo energético (electricidad, etcétera).
Alain Anglade, ingeniero jefe de la ADEME, explica que “enviar un correo con un fichero adjunto, una foto, un pdf o un documento de otra naturaleza tiene un consumo energético más alto de lo que pudiera imaginarse. Nosotros hemos calculado, de entrada, los costos más evidentes. Sin olvidar el impacto del costo de los materiales utilizados en todo el proceso de transmisión, cuya fabricación también ha consumido mucha energía. Los primeros resultados cifrados dan una idea aproximada del costo creciente que tiene y tendrá la difusión masiva de correos electrónicos”.
La comunicación y la publicidad online es una tendencia al alza, y se espera que la cifra de correos enviados por día se multiplique en 2013 hasta llegar a los 500.000 correos diarios.