IAB Spain ha publicado el posicionamiento de IAB Europe que solicita normas para los flujos internaciones de los datos.


El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha dictado la  Sentencia que anula la Decisión de la Comisión sobre Puerto Seguro, por la que se autorizaba la transferencia de datos personales a Estados Unidos a aquellas empresas que proporcionan un nivel adecuado de protección en virtud del cumplimiento del “Acuerdo de Puerto Seguro” (Safe Harbor Agreement) publicado por su Departamento de Estado. El Safe Harbor es un sistema por el que las empresas adheridas se comprometen a someterse a una serie de reglas para proteger la privacidad, y cuya vigilancia de cumplimiento corresponde a la Federal Trade Commission de Estados Unidos. Entre otras consideraciones, el Tribunal apunta en su fallo al hecho de que los poderes públicos no están obligados por los principios de Puerto Seguro, y en caso de conflicto entre la ley estadounidense y estos principios, las empresas deben cumplir con las leyes de Estados Unidos. Esto, según el Tribunal, permite la interferencia con los derechos fundamentales de las personas cuyos datos personales se transfiere desde Europa a Estados Unidos.

Tras este importante fallo, la industria de la publicidad digital europea solicita normas que posibiliten estos flujos internacionales de datos que contribuyen a que el mercado siga creciendo e innovando. En ese sentido, IAB Europe, que aglutina a los diferentes IAB´s nacionales, solicita a la Comisión Europea y al gobierno de Estados Unidos que hagan frente a los diversos problemas y obstáculos señalados por el Tribunal, y pongan en marcha con prontitud un nuevo marco que permita la transferencia de datos personales de los ciudadanos europeos entre Europa y Estados Unidos con fines comerciales.

Townsend Feehan, CEO de IAB Europe, considera que: “El fallo de hoy implica una gran incertidumbre en cuanto a las posibilidades futuras de transferencias. Todas las partes deben ahora asegurarse de que esas transferencias, de las que depende la economía digital de la UE de manera crítica, pueden continuar de una manera que permita el crecimiento y la innovación, al tiempo que proporciona una protección adecuada de los datos personales de los ciudadanos europeos”.