Si los Millennials han sentado sus propias bases en cuanto a consumo mobile se refiere, los amantes del Snapchat podrían considerarse como una nueva especie, la denominada “Generación Z”, en la que “Finstagran” se convierte en el verdadero “Instagram” y el streaming en tiempo real, una forma de entender la vida. Un abanico de adjetivos para definirlos sería “independientes”, “tenaces”, “obstinados”, “pragmáticos”, “autodidactas” y “plurales”.
En este entorno, McCann Truth Central, la unidad global de inteligencia de McCann Worldgroup , ha llevado a cabo su nuevo estudio “The Truth About Youth”, en primicia para Europa, en el Teatro Kapital de Madrid.
Entre otros muchos, los principales hallazgos del estudio revelan que el 87% de los jóvenes afirma que “es importante experimentar, incluso si esto conlleva cometer errores”. Este sentimiento es particularmente pronunciado en España (89,7%), Rusia (92%), China ( 91%), Canadá (90%) y Hong Kong (90%). Por otro lado, el 94,3% de los jóvenes consideran que es importante luchar por aquello en lo que creen. Lo que define a una generación son sus creencias y nos encontramos ante una generación con prioridades diferentes. En cuanto a las preocupaciones, las generaciones mayores de jóvenes se centran en la crisis global, las libertades religiosas y políticas, o la erradicación de las enfermedades. Mientras que los más jóvenes, pese a no olvidarse de esto, se preocupan más por la igualdad racial, de género y de LGBTQ.
Tras la presentación del estudio, tuvo lugar la mesa redonda “Figuring it out together” orientada a intentar descubrir qué deberían hacer las marcas para conectar con los jóvenes. La mesa contó con la participación de Alex Puértolas, reconocido Youtuber español, Clemente Cebrián, co-fundador de “El Ganso”, Hugo Sáez, Director Creativo de McCann, Lara Bardal, Senior Strategic Planner de McCann, moderados por Gonzalo Sánchez-Taíz, Director General Ejecutivo de McCann España, quien afirmaba tras la finalización del evento: “Pienso que el estudio demuestra que el target de la llamada Generación Z es muy complejo de seducir; pero me niego a reconocer que a ese target no le interese la publicidad. Lo que no les interesa es la publicidad plana, intrusiva y poco creativa. Pero la buena publicidad es de hecho un buen contenido y si sabemos tocar la tecla los jóvenes entran en el juego publicitario sin ninguna duda.”