“Cuando alguien te mira, lo que quiere es verte a ti, no un montón de reflejos”. Así arranca el spot de la nueva campaña de Multiópticas, que realiza el lanzamiento de su cristal antirreflejante exclusivo Beslayt.


Con la transparencia absoluta como protagonista, los spots de televisión no son otra cosa que un torture test extremo, en el que se somete a los protagonistas a una gran cantidad de fuentes de luz para ver su efecto sobre las gafas. 

Con estas lentes se eliminan los reflejos. Con cristales sin tratamiento, se pierde entre el 8% y el 16% de la luz (tanto natural, como artificial, de pantallas, flashes fotográficos…); una luz que entonces realiza un ‘efecto rebote’ sobre la lente, provocando que con el reflejo no se vean los ojos de quien las lleva.